Se reconoce socialmente en 1957 con la presentación de algunos ejemplares en la Convención de Criadores de Kircaldy (Escocia), naciendo así esta nueva raza que parte de la selección de canarios Border.
Se creó principalmente en el Condado de Fife y al principio sólo buscaban mantener el estándar original del Border, el cual se estaba comenzando a seleccionar en el aumento de su talla y había criadores opuestos a este movimiento, los cuales no solo mantuvieron el tamaño original, si no que se propusieron reducirla para diferenciarse aún más del Border.
Para poder trabajar la idea con un mismo fin, los amantes del Fife formaron un Club, que asentaría sus bases en 1958 con el nombre de Fife Fancy Canary Club, dedicándose al fomento y mejora de la raza, así como trabajando su estándar para un reconocimiento oficial posterior, el cual llegó en el Campeonato Nacional de Reino Unido en 1975. No tardó mucho en distribuirse por el resto de países europeos, ya que hay registros de Fifes en concursos de Alemania e Italia ya en el año 1980.
Desgraciadamente, también hubo una rápida expansión por su fama de buen criador, motivo por el cual sufrió un deterioro en su selección, produciendo un estancamiento de la raza en muchos países.
Evolución
En sus comienzos, partíamos de ejemplares que rondaban los 14 cm. y sus formas eran más larguiruchas, en algunos documentos antiguos, se habla de cruces con Gloster para ir consiguiendo redondez, en la primera década de trabajo, se consiguió reducir su talla hasta 12 cm. y darle ya cierto aspecto ahuevado.
En su zona originaria, la raza no se desvió mucho de la idea principal a pesar del paso del tiempo, buscando el ejemplar pequeño y de formas redondeadas, fijando su cuerpo en una forma ovoide pero en la difusión de la raza por los países europeos, se han producido diferentes líneas debido a la mala selección, a la exportación de ejemplares que no cumplían el estándar y a la cría descuidada buscando nodrizas de otras razas, así en España hubo un momento en el que los ejemplares, por lo general, no cumplían la talla y la forma corporal era excesiva.
Actualmente, el estándar sigue con la idea original, aunque define la forma de su cuerpo como un huevo y hoy en día la mayoría de los criadores, buscan un Fife más redondo, casi esférico, con cola corta, patas bien definidas con cierta alzada y un matiz muy importante, el conjunto de cabeza y nuca, la primera muy redonda y la segunda muy marcada, lo que va derivando un poco del estándar de enjuiciamiento.
¿Cómo es el Fife?
Lo más llamativo de la raza es su actitud, siendo un pájaro curioso, simpático y de alegres movimientos, muy recomendado para aquellos criadores que se están iniciando en la canaricultura, ya que es un ave poco propensa a enfermedades y de fácil cría.
Lo podemos encontrar en la mayoría de colores y sus formas redondeadas en cabeza y cuerpo a pequeño tamaño, lo hacen inigualable.
No requiere cuidados especiales, aunque es propenso a acumular grasas, por lo que una dieta equilibrada siempre será un beneficio, por lo demás, agradecerá todo el buen manejo que se haga de él en cuanto a cuidados, alimentación, tratamientos, etc. pero es un pájaro resistente que incluso se adapta sin problemas a climas muy diversos.
Cría
Como ya habréis entendido anteriormente, el Fife es un buen criador, tanto hembras como machos alimentan a las nidadas. Son aves bastante fértiles y con la alimentación adecuada, la hembra puede hacer tres puestas sin mucho problema, con una media fácil entre 4 y 5 huevos por puesta. Es raro el macho que molesta a la hembra en el nido, por lo que la mayoría de las nidadas se hacen dejando ambos progenitores.
Durante todos mis años de cría, he probado todas las combinaciones en cuanto a machos y hembras, un macho puede estar con dos hembras sin problema, mejor si le espaciamos una semana entre una y otra, también he criado rotando machos, de forma que la hembra hacía sus tres puestas con diferentes machos, estos, en el momento de apartar los pollos, se quedaban con los pollos para rematar su cría y mientras, la hembra ya tenía otro macho en su jaula, hay más combinaciones pero la que yo considero más efectiva es la de un emparejamiento estable, un macho con su hembra toda la cría, buena alimentación y se reducen muchísimo los problemas que pueden surgir en la cría.
Emparejamientos
La forma más básica de hacer una pareja, es juntar intenso x nevado o viceversa, pero si queremos hacer las cosas un poco mejor, hay que entrar en detalles, siendo siempre la finalidad buscar una compensación entre la pareja, esto quiere decir, por ejemplo, que si tenemos un macho con mucha cabeza, deberemos buscar una hembra con una cabeza más moderada, obviamente esto es un ejemplo y se intentará buscar una compensación entre todas las virtudes y defectos de nuestros ejemplares.
Por lo general, los cruzamientos de nevado x nevado no están recomendados, salvo excepciones muy concretas por tipos de pluma, en cuanto al intenso x intenso, se hace buscando reducir talla pero es un cruce complejo en cuanto a que también se pierden otras virtudes como el volumen. Dentro de los matices a tener en cuenta a la hora de hacer una pareja de Fife Fancy, podemos fijarnos en dos detalles, el tipo de pluma y el color, ambas cosas son influyentes en el resultado final. En la mayoría de los casos, por el tipo de pluma, encontraremos intensos de pluma corta y nevados de pluma larga pero esto no es siempre así y ahí es donde debemos decidir que necesita la pareja, os dejo algunos ejemplos a groso modo, ya que como hemos explicado anteriormente, hay que ver los ejemplares en conjunto; intenso pluma corta x nevado pluma larga, intenso pluma larga x nevado pluma corta o en ambos casos, introducir ejemplares con una pluma intermedia, por lo que el resto de valores del pájaro, definirá la pareja que necesita.
En cuanto a colores, hay muchos criadores que discrepan de ello pero tras realizar diferentes cruzamientos y estudiar su evolución, podemos ver que para conseguir avanzar en nuestro aviario, también podemos contar con este factor como compensatorio, teniendo en cuenta que el blanco nos da ejemplares de más volumen, pluma fina y sedosa, el amarillo, similar al blanco pero ya contando con una estructura algo más compacta, sobre todo intensos, el verde es una de las mejores plumas de trabajo, nos da una pluma de dureza media aunque en ocasiones se endurece más de lo que nos gustaría aunque este color deja definir bien la forma del ave, tenemos también el gris, que es una buena pluma de trabajo, con dureza , que si viene de un mal cruzamiento, incluso se eriza. En el Fife contamos por último con los brunos (plata fondo blanco y oro fondo amarillo) con esta pluma conseguimos dar suavidad al resto de melánicos pero no se debe abusar de ella en nuestras parejas, ya que también transmite propiedades de las plumas lipocromas y eso nos puede llevar a ejemplares no deseados.
Todo lo anterior expuesto sobre el uso de los colores, es para usarlo con moderación, ya que las propiedades que os comento en cada color, no son matemáticas, por ejemplo, supongamos que queremos sacar ejemplares blancos 100% pero la línea de lipocromos que tenemos ya, tiene la pluma pobre y abierta, derivada de cruzar blancos y en algún caso amarillo, ¿con qué hago la pareja? En este caso, yo recomiendo el cruzamiento de blanco 100% x gris 100% o viceversa, si no vienen de ejemplares píos, es más complejo que salgan píos y ya que contamos con la misma base genética (el fondo blanco), obtendremos ejemplares lipocromos, que serán blancos y ejemplares melánicos que serán grises, ¿qué hemos podido conseguir positivo?, teniendo en cuenta que esto no es ciencia exacta, podríamos haber obtenido ejemplares blancos con una mejor calidad de plumaje, ya que le hemos introducido dureza y se verán más compactos, muy probablemente, también habrá pájaros para descartar, con tipos de pluma que no aporten nada positivo al criadero.
Estándar
• Talla: Siguiendo la idea de su creación y evolución, el punto más importante es su talla o tamaño, medido siempre en posición de trabajo, desde la parte alta de su cabeza hasta la punta de la cola en una línea recta. En concursos, no deben posicionarse con buenas puntuaciones, todos aquellos ejemplares robustos, que superen los 11 cm. ya que hoy en día estamos viendo Fifes de talla muy conseguida, estando algunos ejemplares entre 9 y 10 cm.
• Cabeza y cuello: Cuenta con una cabeza pequeña, esférica y perfectamente simétrica, con mofletes bien marcados, el ojo centrado y un pico cónico proporcionado a la misma. La nuca se busca bien marcada, con un cuello corto que defina con mucha claridad, la diferencia con la espalda. En ocasiones, nos podemos encontrar con ejemplares de cabezas planas, grandes o sencillamente desproporcionadas respecto al cuerpo, debido a malos cruzamientos en la mayoría de los casos.
• Cuerpo y espalda: De forma ovoide, hombros anchos y redondeados, con un pecho proporcionalmente redondeado, sin formas pesadas pero lleno de pluma, con una línea uniforme que une la cola con el cuello. La espalda será redondeada y ligeramente abombada. En este punto nos encontramos muchos ejemplares que con dificultad llegan al estándar, con espaldas planas o triangulares vistas desde arriba, pechos sin forma o flancos muy voluminosos, en algunos casos, resultantes de cruces de nevados.
• Alas: Serán de una longitud acorde al cuerpo corto de la raza, uniéndose sobre el inicio de la cola, sin cruzarse, adheridas al cuerpo. Aquí no es tan fácil ver ejemplares que cruzan las alas en exceso pero sí es común ver los que las caen, en algunas ocasiones se debe a ejemplares con exceso de grasas, haciendo que el grosor de su cuerpo sea un problema para unir sus alas, en otros casos, la mayoría, es un defecto genético.
• Plumaje: Liso, compacto y adherido al cuerpo. Nos encontramos Fifes con plumajes erizados, muy duros, abiertos, etc. pero un defecto generalizado es el pecho abierto, es tan generalizado que muchos criadores lo tienen como una virtud de la raza que ayuda a definir la forma del pecho pero esto no es así, es un defecto genético que estropea el pecho del ave.
• Color: Vivo, uniforme, brillante y profundo. Están autorizados todos los colores salvo el factor rojo. En colores encontramos pocos problemas, ya que se hacen muchos cruzamientos entre colores con lipocromos, melánicos y píos, lo que revive mucho el conjunto de colores, en algún caso aislado, encontramos pájaros sin brillo o con la melanina apagada, habitualmente por una mala gestión de la luz en el aviario.
• Posición: Altivo, vivaz, semi-erguido, formando un ángulo de 60 grados respecto al posadero, con la cabeza alta. Aquí podemos observar ejemplares que no llegan a esa posición, lo que hace poco vistoso el Fife en conjunto, hablamos de pájaros que se quedan agachados sobre el posadero o sencillamente se quedan en una posición baja, flexionando las patas como si de un raza española se tratase.
• Muslos y patas: De una longitud media, ligeramente flexionadas y robustas, con unos muslos cortos y parcialmente visibles. En el caso de los intensos, es raro el ejemplar que no enseña el muslo pero en el caso de los nevados, los muslos muchas veces se ocultan en el plumaje, ya que se intentan acortar tanto que cuando se trata de ejemplares con la pluma un poco más larga, los esconden.
• Cola: Corta, estrecha, redondeada en la base y abundante de plumas. Es muy importante que esté completa de plumas, ya que la falta de plumas en cola, debe ser penalizada sin reparo, debido a que modifica severamente la talla general del ave y da un aspecto más corto.
Jaulas de exposición
Aunque no he encontrado datos concretos del momento en el cual se define la jaula exacta, posaderos y otros datos para la exhibición, podemos decir que se estableció el modelo de jaula casi en los inicios de la raza, ya que se utiliza una jaula de origen inglés que se ha podido ver incluso en las fotos y dibujos más antiguos que se conocen de la canaricultura inglesa, obteniendo esta el nombre de jaula Border.
Debido al tipo de “show” que se organiza en la cuna del Fife, los criadores suelen tener un equipo de jaulas exclusivamente para ese momento, ya que en su gran mayoría se trata de piezas hechas a mano con gran calidad de detalles y una fineza extrema, la cual acota su uso exclusivo para ese gran momento, igualmente, para acostumbrar y trabajar con el Fife de cara a los concursos, disponen de otras jaulas en sus aviarios. En España, la gran mayoría de concursos ofrecen ya las jaulas a sus participantes, por lo que los criadores solemos tener ciertas jaulas en casa para hacer los trabajos previos a la exhibición, de forma que cada ejemplar esté acostumbrado a las dimensiones de la jaula, espacio entre sus posaderos y situación del comedero.
Para los enjuiciamientos, se ha establecido la jaula Tipo Border con dos posaderos de 12 mm y separados por 5 barrotes, preferentemente los posaderos serán de madera, que encajen a la perfección con los barrotes, ya que al igual que en otras razas a las que se les exige una posición, no llegarán a ella si el posadero tiene holgura. Conociendo como Presidente y Juez, las limitaciones económicas o logísticas de muchas asociaciones locales, soy consciente de que se ha dado el caso de alojar las gamas de Fife en jaulas de otros tipos, sabiendo estos problemas, recomendamos a las asociaciones, que de no tener jaula tipo Border, opten por jaulas de Cúpula baja, de no tenerla, elegir la Cúpula alta, modelo oficial para otras muchas razas pero en ningún caso, someter el enjuiciamiento del Fife a jaulas de Color, ya que el principal afectado será el ejemplar y su criador, en segundo lugar, estamos imposibilitando la labor de su enjuiciamiento, incluso llegando el Juez a no enjuiciar la gama por no poder valorar correctamente sus virtudes, además, por ser más directos, podemos decir que está fuera del Reglamento de enjuiciamiento.
Enrique García
Juez de Postura CJA